Autoridades de Japón podrían flexibilizar la entrada de viajeros extranjeros con alto poder adquisitivo que usen jets privados y superyates.
La llegada de la variante Ómicron de COVID19 a Japón trajo consigo nuevas restricciones. El país asiático, que había flexibilizado parte de sus políticas con respecto al COVID19 en octubre, tuvo que implementar un cambio radical en las medidas de ingreso.
Las autoridades japonesas tomaron la decisión de cerrar las fronteras de forma preventiva por un mes; e incluso mandaron a las aerolíneas a cancelar todas las reservaciones de vuelos a Japón.
No obstante, a tres semanas del anuncio del primer caso positivo de Ómicron en Japón, el gobierno de Japón ha manifestado diferentes cambios; sin embargo, hay uno en particular que llama muchísimo la atención.
Como podemos recordar, las personas que tienen posibilidad de ingresar a Japón son los residentes extranjeros, y los japoneses; además, hay casos especiales que entran en la categoría de reencuentros familiares, y también por razones humanitarias.
Pero ahora se ha filtrado una nueva información sobre las medidas de ingreso de extranjeros a Japón, la cual resulta sumamente particular.
Los jets privados y los superyates podrían ser los medios con mayor prioridad en Japón
El gobierno de Japón tiene en mente flexibilizar la entrada de extranjeros que usen jets privados y superyates.
Tal como se lee, las autoridades de Japón podrían permitir el acceso al país de ciertos viajeros con un alto nivel socioeconómico. Eso sí, hay una buena razón para esta decisión, y tiene que ver con los aportes de estos extranjeros al país.
Hace un tiempo hicimos un artículo sobre si era posible o no la reactivación del turismo en Japón, en donde expusimos el tema monetario. Con la caída del turismo en Japón, también la economía se vió afectada; tanto a nivel micro (personas trabajen con el sector turístico) como macro (la ciudad de Kioto y su plan para evitar caer en bancarrota)
Se espera que al darle prioridad a estos viajeros, puedan aportar un capital considerable en el país y ayudar en la recuperación económica post pandemia.
Entre las posibles medidas de flexibilización para los viajeros extranjeros que usen jets privados y superyates están:
- Acortar el permiso de aterrizaje de 10 días a 3.
- Permitir que los operadores de jets privados soliciten el vuelo y el reabastecimiento de combustible en una sola parada.
- En el caso de hacer varias paradas en el territorio japonés, se podrá declarar el número de tripulantes, pasajeros y cargamento al entrar y salir.
Además, la Oficina Nacional de Turismo en Japón (NJTO) colaborará con el Gobierno de Japón y ayudará a seleccionar a 10 regiones modelos; a las cuáles se les apoyará económicamente con el fin de desarrollar productos y servicios que puedan atraer a los viajeros extranjeros que usen jets privados y superyates.

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