- Un nuevo negocio japonés que pretende revolucionar el mercado de los dulces en Japón
- Los consumidores pueden imprimir los rostros en galletas, pasteles y macarons.
El impacto que tuvo (y tiene) la pandemia del COVID19 en países como Japón ha sido muy dramático. Si de por si en el mundo se ha manifestado un malestar colectivo; no es para menos que en uno de los países focos también se presenten irregularidades con la población.
El coronavirus en Japón no es un juego; y eso ya lo hemos dejado claro con los diferentes artículos que realizamos sobre la evolución del COVID19 en el territorio japonés.
La llegada de las nuevas cepas del COVID19, el confinamiento, el aislamiento social y el alto número de contagios; son escenarios que generan un alto grado de estrés en las personas que habitan el país asiático. La adaptación no ha sido un proceso sencillo; y aunque se pretenda establecer mecanismos que promuevan aprender cómo convivir con el virus, igual continúa siendo un tema incómodo para los habitantes.
Sin embargo, las personas han tenido que sobrellevar esta situación y seguir con sus vidas, y eso también incluye a los empresarios y comerciantes; porque el virus ha traído una nueva realidad, y con ella nuevas necesidades humanas.
En Japón ya son cientos los negocios que ahora incluyen en su dinámica comercial el contexto “coronavirus”; ya sea en su actuar laboral o en la creación de productos, bienes o servicios enfocados en brindarles a los usuarios seguridad y satisfacción.
Hoy hablaremos sobre un nuevo emprendimiento japonés, que aunque es bastante singular, ha sido fabricado para sacarle una sonrisa a los japoneses en estos oscuros momentos: Rostros comestibles.
Estos rostros fueron elaborados por la compañía japonesa IINA Store, que ha brindado la posibilidad de que los consumidores puedan imprimir los rostros de sus familiares, amigos o de cualquier persona que quieran.
La función principal de estos rostros es que las personas que hayan pasado mucho tiempo en confinamiento, y que por este motivo no hayan visto a sus personas más allegadas, puedan imprimir sus rostros en este inusual postre.
Los rostros pueden imprimirse en galletas, pasteles y macarons, sólo necesitarás una foto para llevar a cabo el proceso y tu postre estará listo.
El producto estrella de este negocio son las galletas Dorayakis (mejor conocidas en el menú como kao dorayaki o rostro dorayaki), que consisten en dos pequeños panqueques que están unidos por una pasta de judías dulces
Aunque pueda sonar algo loco, estos rostros son un muy buen regalo para los demás, y también alegran un poco a los japoneses en este periodo de confinamiento ocasionado por el COVID19 en Japón.
Por los momentos, estos rostros sólo pueden ser adquiriros en la tienda de IINA Store ubicada en la ciudad de Iwaki, prefectura de Fukushima; sin embargo la posibilidad de llevar estos rostros a más locaciones japoneses está sobre la mesa.
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