Entre los nuevos elementos y prácticas que ha ocasionado la pandemia del coronavirus en el mundo, se encuentra el uso constante (y obligatorio) de las mascarillas. Los protectores faciales junto a las mascarillas se han convertido en artículos de primera necesidad para la población, pues el empleo de estos contribuye al cuidado personal y colectivo contra el COVID19.
Todos los países en el mundo han propuesto distintas medidas y políticas públicas en sus territorios en lo que al cuidado y protección contra el coronavirus se refiere. Recordemos los destrozos que esta enfermedad ha ocasionado, y el papel que ha tenido sobre la reciente crisis sanitaria para el combate de la misma.
La cotidianidad ha cambiado, y eso no es un secreto para nadie. Sin embargo, aunque nos encontremos con estrictas cuarentenas, un obligado aislamiento, la creciente distancia social y los mecanismos de higiene más precisos; la vida sigue su curso, y muchas personas siguen manteniendo las mismas responsabilidades que tenían antes de que la pandemia del COVID19 llegara.
Claro que esta rutina debe estar anclada a las normativas de bioseguridad que actualmente se emplean todo el planeta; porque sin importar el rumbo que tengamos en nuestra vida, es un deber individual y colectivo mantenernos a salvo del coronavirus, evitando contagios e infecciones que ya han demostrado que en muchos casos pueden ser mortales.
Muchas de las empresas especializadas en la fabricación, han tomado en consideración el contexto del COVID19, creando de esta forma productos que se posicionen gracias a su practicidad en torno a la pandemia y que garantiza protección; además de que también puedan brindarle al usuario más comodidad (y utilidad) en alguna de sus actividades diarias.
Entre estas empresas se encuentra Donut Robotics, una start-up japonesa que ha creado algo inusual: Una mascarilla inteligente que funciona como un traductor, capaz de detectar hasta 8 idiomas completamente diferentes.
Esta mascarilla ha sido fabricada con silicona y plástico, del mismo modo fue creada especialmente con el fin de facilitar la comunicación, adaptándose de una forma ejemplar al uso prolongado de equipos faciales para la prevención del COVID19.
Su nombre es C-Face Smart, y ha llegado para revolucionar la interacción humana en tiempos de pandemia.
La interfaz de C-Face Smart le dará al usuario la posibilidad de traducir hasta 8 idiomas distintos, ampliar su voz y transcribir dictados de forma automática. El consumidor también podrá conectar la mascarilla directamente a su teléfono celular inteligente por medio de tecnología Bluetooth.
Lo que más llama la atención es su papel de traductor en los idiomas: Chino, inglés, español, japonés, coreano, indonesio, francés y vietnamita
Pero eso sí, es importante hacer saber que esta mascarilla por si sola NO CORRESPONDE ningún medio de protección contra el coronavirus, ya que en su diseño se encuentran unas ranuras. Sin embargo, es perfecta para colocarse por encima de una mascarilla estándar de uso sanitario.

Ahora cuéntanos, ¿Te gustaría usar esta mascarilla? ¿Le ves utilidad? Queremos saber tu opinión