El nombre científico del Oso Tibetano es Ursus thibetanus, y tiene las siguiente siete subespecies: Ursus thibetanus formosanus, gedrosianus, japonicus, laniger, mupinensis, thibetanus, ussuricus; estos habitan desde china hasta la india.
Estos animales se caracterizan por tener garras afiladas y el pelaje negro, además de una mancha en forma de V color crema en el pecho. Este es un pariente cercano del oso negro americano.
Pueden llegar a medir casi 2 metros y los machos pueden pesar hasta 220 kilos y las hembras 120 kilos. Se clasifica dentro de los animales omnívoros, y se alimenta dependiendo de la estación del año; por ejemplo, en otoño come bellotas, nueces y frutas ricas en grasa, algunas veces trepan los árboles para alcanzar los alimentos que se encuentran allí.
Su época de reproducción es entre junio y agosto. Las hembras tienen una matriz diferida, esto quiere decir que el ovulo se desplaza por la matriz hasta ser fecundado; en este proceso pueden pasar días, semanas o meses, esta hembra dura 200 días embarazada.
Una vez nace él bebe, dan sus primeros pasos a los cuatro días, y abren los ojos a la semana de haber nacido. Se quedan con su madre hasta los 3 años de vida y una vez se van, la madre vuelve al ciclo de la reproducción.
El Oso tibetano puede ser un animal muy peligroso, y reacciona de manera agresiva a los humanos. Son muy pocos los enemigos que este gran animal puede tener, y además que tiene una gran habilidad para escapar; a pesar de esto, están en peligro de extinción.
Muchos granjeros suelen matarlos porque amenazan sus cultivos, además de la perdida de hábitat que están padeciendo por la alta deforestación en los bosques; y por último la caza de este para obtener su bilis, ya que se utiliza para fines medicinales.

Si quieres ver más artículos como este, no dudes en seguirnos en Instagram y leer nuestro blog.