Pedir perdón en japonés tiene más de una función y significado según la palabra que utilices. Descubre algunas de las formas en las que puedes disculparte.
No es que todo el tiempo se disculpen, pero las diferentes variantes para pedir perdón son palabras muy comunes en el país del sol naciente y llegan a ser hasta 20, aunque muchas son extremadamente formales o ya son parte del japonés antiguo—. Desde “gomen-nasai” hasta “sumimasen”, a los cuales los fanáticos del anime tal vez ya estén acostumbrados.

Sin embargo, aunque los distintos “perdones” suenen con regularidad en las calles de Japón, la realidad es que su significado y utilidad no siempre es la misma.
«Sólo el 10 % de “sumimasen” es una disculpa. El noventa por ciento se usa para mostrar respeto, cortesía, honestidad. Es una palabra de diario.
Cuando alguien hace algo por ti, quitarse de tu camino en la tienda de abarrotes o sostener una puerta “ah, sumimasen” es la respuesta común». Explica Lauire Inokuma, experta en el idioma japonés por la universidad de Cornell.

En su “perdón” también lleva inscrito un sentir de agradecimiento, pero sobre todo de respeto por los demás. Ya que en una isla en la que existe una larga tradición histórica que tiene como pilar la conciencia plena de los demás; es difícil no utilizar algún término —o varios— para mostrar ese sentimiento de consideración y empatía por las otras personas.
Algunas de las otras frases que se pueden utilizar para expresar perdón están “warui warui” que es extremadamente coloquial y usado entre amigos; “yurushite” que es una forma dramática para pedir el perdón de alguien; “kanben” que se puede usar para pedir piedad; “shazai” tiene una connotación más formal y es utilizado para indicar que te disculpas por crearle más trabajo a alguien; “owabi” que es una de las formas más formales, pero que ya pertenecen más al japonés antiguo, y “moushiwake nai” (y sus múltiples variaciones, así como en el caso de gomen) que son una disculpa extremadamente formal, exclusiva para cuando alguien se dirige a algún mayor o cliente, por ejemplo.

Esta diversificación de sentidos y usos para una palabra o la expresión de un sentimiento no es exclusiva del japonés. En nuestro idioma pasa algo parecido cuando queremos ser corteses y demostrar gratitud por un gesto. Por ejemplo, sucede cuando alguien ofrece algo que la otra persona no quiere –como un volante– y la respuesta para rechazarlo es un “gracias”. O incluso cuando alguien pide algo, como una moneda y nosotros contestamos —a veces por accidente— con un agradecimiento como método para suavizar la negativa.

Tal vez nuestro caso esté más relacionado con el temor a decir «no» más que a un afán de mostrar respeto por los demás, como en el caso de los japoneses. No obstante, la realidad es que este tipo de juegos con el sentido de las palabras y su utilización en el habla coloquial suceden en todos los idiomas y son reflejo de los rasgos culturales de cada país y región.
Cortesía, www.culturacolectiva.com
Si quieres ver más artículos como este, no dudes en seguirnos en Instagram y leer nuestro blog.